Septiembre llegó pegando fuerte a la raza de bronce: las ya mencionadas reformas de Peña, los maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) -a la cual dedicaré un pequeño espacio más adelante-, la selección mexicana es una burla de sí misma y pierde en el Azteca con Honduras, y para acabarla de joder se nos muere Johnny Laboriel, D.E.P.
Pero hay una cosa más en este valle de lágrimas y risas septembrino. Llegaron las fiestas patrias y pronto saltaron los inconformes. Ya iba yo a dar el grito de manera muy vehemente cuando se me acerca una persona y me dice: "¿Qué festejas,si no hay nada qué celebrar?
Mis convicciones y pensamientos tal vez no comulguen con los de esa persona, pero como dice la frase atribuida a Voltaire: "No comparto lo que dices, pero defenderé hasta la muerte tu derecho a decirlo".
También las redes sociales juegan su papel fundamental en este asunto. Se ha vuelto viral un video donde aparece un joven en alguna línea de metro del Distrito Federal, dicho video tan sólo en Facebook tiene ya casi 50,000 me gusta y casi 70,000 veces ha sido compartido. El joven sin temor alguno de represión, levanta la voz en un espacio público -lo que le aplaudo-, lamentablemente su discurso tiene algunas inconsistencias lo cual me saca de quicio un poco, pues por eso la gente vive de otra información y cambia de ideas. Favor de no confundir patriotismo con nacionalismo.
En este video el joven se atreve a decir que somos un país ignorante y festejamos el grito el día 15 de septiembre porque era el día del nacimiento de Don Porfirio Díaz Mori. Y sí, ese día nació. En mi pequeña biblioteca hogareña las Memorias de Porfirio Díaz rezan en el primer capítulo: "Nací en la ciudad de Oaxaca el 15 de septiembre de 1830. Mi padre fue José Faustino Díaz y mi madre, su esposa, Petrona Mori".
Lo que este joven, desafortunadamente no parece saber, es que a don Juan Wenceslao Sánchez de la Barquera, secretario en la presidencia de Guadalupe Victoria se le ocurrió en 1824 -6 años antes del nacimiento de Díaz-, festejar anualmente el aniversario del inicio de la guerra contra los españoles. Y más allá, en 1845, Antonio López de Santa Anna -cuando Díaz cumplía 15- inauguró la "Ceremonia del grito" para recordar a los héroes patrios. Estableciendo que sería cada 15 de septiembre a las once de la noche. Y si bien el joven acierta en decir que fue en el 16 cuando fue el grito, la historia nos dicta que fue en la madrugada, por eso Santa Anna lo estableció a las once de la noche del 15, para evitar la fatiga de despertarse de madrugada a iniciar el festejo. Lo que sí hizo Díaz fue llevar la campana de Dolores Hidalgo a Palacio Nacional.
Y si bien, Porfirio Díaz tuvo muchos errores y padeció gravemente de la enfermedad del poder, quiero que me digas un presidente que no haya cometido error alguno. Y no me vengas con que Juárez porque la verdad es otra. Además del gran progreso que Díaz trajo a México. Si has visto una película en el cine o tienes luz en tu casa se lo debemos históricamente a ese señor. Cuando empezó Díaz en el poder la red ferroviaria era de 465 km y al finalizar la dictadura era de 19,000. ¿O no has visto el Palacio de Bellas Artes, el teatro Juárez en Guanajuato, el hemiciclo a Juárez o la Columna de la Independencia -el ángel-? ¿Te suena la UNAM, fundada por Justo Sierra? Todo eso y muchas, muchas cosas más fueron hechas en la presidencia de Díaz. Ok, no te gusta como presidente pese a todo eso, pero festejas que le ganamos las guerras a Francia. Ahí te encargo a Díaz. El joven dice muchas cosas acertadas, pero también otro par de sandeces. No seas de los que todavía creen que Juan Escutia se aventó envuelto en la bandera.
Los Maestros
Desde las últimas semanas de agosto un grupo de maestros del CNTE se han apostado en la ciudad de México, causando caos para demandar algunas cosas, entre ellas: Que se revierta totalmente la reforma educativa; una reforma en la que la educación sea un derecho (Ya es); la principal es la demanda del 6% del PIB de Guerrero para invertirse en educación (lo que me parece genial);incrementar el número de plazas de base (esto ya no tanto), etc.
El problema de solicitar tantas plazas es que se heredan, y ellos, trabajen o no trabajen, den o no den clases, se van a sus hijos y a los hijos de sus hijos y eso está mal. Además de dejar a cada rato a las zonas más pobres de Guerrero y Oaxaca sin educación. Ahora, yo estoy totalmente de acuerdo en que levanten la voz y busquen lograr sus cometidos -mientras sean serios-, el problema es que el movimiento del CNTE está dejando de ser magisterial y se está volviendo popular, como el chamaco este, y van causando caos: ocupaciones, cerrando carreteras, aeropuertos, plazas y peleando y destruyendo cosas. Apedrear y reventar los vidrios de un Starbucks porque es imagen del imperialismo. Fatal. Ojalá y ese Starbucks haya sido de un maestro que ahorró toda su vida para poner su franquicia.Tampoco estoy de acuerdo en que la Policía Federal desaloje violentamente al grupo de catedráticos. Pero aquí no hay inocentes todos golpean y todos avientan piedras.
Lo más fácil de quejarse es que es siempre contra el gobierno. Hoy se quejan de Peña y de su ignorancia. Ayer se quejaban de Calderón y su guerra y de Fox y su ignorancia. Antier lo hacían de Zedillo y Salinas y de la Madrid. Y mañana si es López o Chepina o Quadri va a suceder lo mismo. Es increíble que en pleno siglo XXI el mexicano -sobretodo del DF al sur- se viva quejando y quejando, esperando a que el gobierno les resuelva la vida. No es el gobierno, sino la mentalidad del mexicano la que nos hunde: Quieres una ciudad limpia: no tires basura en la calle; no quieres guerra contra el narco: deja de comprar marihuana y cocaína; quieres un país primermundista: no te quejes tanto y actúa, deja de hablar y acciona.
Celebración
México siempre ha sido un país unido. Han tratado de chingarnos y nunca lo han podido hacer, porque siempre hemos permanecido en unidad y soñando. Y cuando esos sueños se hacen realidad nos levantamos más y más. Desde los tiempos prehispánicos en que peleábamos nosotros mismos por territorios y poder, pasando por los españoles que saquearon nuestras tierras, violaron a nuestras mujeres y mataron a nuestros niños (Grito de Espartano: Auhh, auhh, auhh), por los ríos de traición y muerte que dejó la revolución y la guerra contra el narco sigue dejando, hasta hoy, nos hemos levantado como pueblo. Por nuestra esperanza, y bondad de espíritu nos hemos levantado y lo volveremos a hacer. Eso es lo que hay que celebrar.
Y para todos aquellos que dicen que no respetamos a México y somos ignorantes por tener algo qué festejar, les digo que nosotros como mexicanos tenemos el derecho y la obligación de hacer de este país un lugar mejor. Y adivina qué, te llegó tu chance.
Se les concedió a muchos que México no tuviera nada qué celebrar. Al menos en muchas partes de Tamaulipas, Veracruz, Tabasco, Chiapas, Oaxaca, Guerrero, Michoacán, Colima, Jalisco, Nuevo León, Chihuaha y Coahuila, entre otros. Dos tormentas tropicales con una diferencia mínima de tiempo embistieron las costas de nuestro país por el Golfo y el Pacífico, un hecho histórico y lamentable. Al menos un millón doscientos mil carnales están daminificados. Algunos murieron, otros se han quedado sin casa, otros tienen familiares desaparecidos y la mayoría no tiene ni qué comer, lo único que tienen es agua para beber. Y tú y yo alguna vez hemos necesitado ayuda, aunque sea pa' las guamas o pa' pasar la tarea. Y si te gastas tanto en pisto el fin de semana nada te cuesta hacer algo por nuestros hermanos compatriotas que te necesitan hoy. Podemos celebrar eso, que ayudamos a nuestra raza y cuidamos de nuestra gente. Deja de quejarte y actúa. Lánzate a la Cruz Roja (que también trajo don Porfi a México) y lleva algo de la lista que te pondré a continuación, son cosas que tienes en tu casa.
Una glosa porque yo sí celebro y harto me gusta mi país.
México lindo y querido
"México lindo y querido
si muero lejos de ti
que digan que estoy dormido
y que me traigan aquí."
Con mariachi y con tequila
que suene el Cielito lindo;
el águila en la pupila
dilata el amor y brindo
por la pasión que encandila.
El gusto es el preferido
que en el alma viene a dar
la fuerza en cada latido;
por eso vengo a cantar
México lindo y querido.
Ya se ensancha el corazón
al ondear esta bandera,
que con toda la razón
se entreteje con voz fiera
y se vibra de emoción.
Por eso la vida aquí
se pasa cual en la gloria,
y que se olviden de mí
al transcurso de la historia
si muero lejos de ti.
Cantemos pues en el monte
con la fauna que lo habita,
con el trino del Cenzonte,
que es la risa favorita
del que ve hacia el horizonte.
Ya me voy ya me despido
pues es gozo y a gozar.
Si no viene usté encendido
y me llega aquí a buscar
que digan que estoy dormido.
Es la última y nos vamos
a la tierra mexicana
que esta noche celebramos
y también por la mañana
pues aquí no nos rajamos.
Si me muevo por ahí
deambulando en el destino
no me voy que no es así,
que me marquen el camino
y que me traigan aquí.
Ya te dejo porque me dio hambre, me iba a preparar unos Hot dogs, pero no vaya a ser que me acusen de vende patrias imperialista y me apedreen, mejor me chingo unos tacos de barbacha. ¡Viva México!
Texto: Jesús Cáñez.
Imágenes: Google y Twitter.
Sígueme en Twitter @HijoDeTinTan
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Muy bien Jesús tienes toda la razón con Porfirio Díaz y con los levantadedos y los maestros mejor deberían de protestar por el despojo del gobierno del petroleo y los impuestos.
ResponderEliminarUn abrazote.
Felipe Legorreta